Abusivo castigo para el Juvenil B al perder por la mínima, y de penalti, ante el Atlético Rocío.

Un encontronazo entre Vaquero y Alberto le propinó un pequeño disgusto al zurdo visitante.

ADFC Padre Anchieta | La Laguna

Un aciago penalti privó al Juvenil B de cosechar un más que, al menos, merecido empate ante un Atl. Rocío que dejó claras muestras de que es uno de los claros favoritos a la lucha por el primer puesto de la tabla clasificatoria.

No obstante, este encuentro tiene casi que un sabor a victoria para al Padre Anchieta puesto que si bien al final el marcador se decantó del lado visitante, aunque si nos atenemos a la posesión del balón y al número total de ocasiones de gol el resultado pudo haber sido otro diferente.

El Atlético Rocío no demostró nada diferente a lo que viene realizando a lo largo de la temporada, un claro favorito a la lucha por el título, puesto que, si bien la ausencia de un buen número de efectivos de su alineación titular pudo haber mermado su potencial, la presencia en el terreno de juego de sus sustitutos no recortó el rendimiento del equipo. Pero lo verdaderamente destacable fue el excelente rendimiento de la hueste anchietera, que en apenas dos encuentros su juego ha experimentado un cualitativo salto de calidad, como así lo atestigua lo apreciado en los dos últimos enfrentamientos, primero en El Chorrillo, ante el CD Valeriana, y ahora, en casa frente a un nada desdeñable Atlético Rocío.

Este entretenido y disputadísimo encuentro se inició con dos claros sobresaltos para el portero local Alberto, primer tuvo que emplearse a fondo ante un disparo de un delantero visitante, y poco después casi que se vio obligado a hacer malabarismos con la cabeza, puesto que una cesión de Nahum tuvo que detenerla con la cabeza, para posteriormente alejar el balón de su área.

Tras estos prematuros sustos para el cancerbero local y después de cierto tanteo entre los dos equipos, Ibra trató de sorprender a Víctor con un cabezazo, pero el balón se le fue por arriba del larguero, mientras que el escurridizo delantero lo intentó un minuto más tarde, concretamente en el diez, esta vez con un disparo desde fuera del área, pero el portero visitante Víctor detuvo la tentativa sin problema alguno.

Hubo que esperar hasta la media hora de juego para que el peligro rondase de nuevo una u otra portería, y de nuevo Ibra, con otro lejano lanzamiento trató de sorprender al meta, pero recibió de éste idéntica respuesta, mientras que, a renglón seguido, Alberto tuvo que sacar a relucir sus reflejos ante una incursión en solitario en el área de Brián, que trato de engañar al meta con un disparo a media altura, pero no lo consiguió al adivinarle Alberto la intención.

En otra rápida aproximación al área visitante Diego lo intentó en el minuto treinta y tres con un lanzamiento con su pierna izquierda, pero el balón acabó mansamente en las manos de Víctor, mientras que la segunda tentativa del delantero sí que le ocasionó un serio disgusto al meta, puesto que tuvo que ser su larguero el que repeliese un nuevo disparo de Diego, esta vez en el minuto treinta y nueve, mientras que el propio portero sí que adivino en el minuto cuarenta y dos un nuevo disparo del propio Diego, esta vez atajó el balón con seguridad.

De esta manera concluyó una más que disputadísima primera parte, en la que cualquiera de los dos pudo haberse adelantado en el marcador, destacando, sobre todo, para el equipo local, un elevado nivel de juego que dista mucho del ofrecido hace apenas tres o cuatro jornadas.

En la reanudación fue el correoso delantero visitante Brian el primer en intentar marcar para su equipo, pero su disparo se fue al lateral derecho de la red defendida por Alberto, aunque quien verdaderamente estuvo muy cerca de marcar fue Pablo en el minuto cincuenta y nueve, pero su remate lo sacó un defensor sobre la mismísima raya de gol.

Este toma y daca de ambos equipos, sin renunciar nunca al ataque, se alcanzó el fatídico minuto setenta y dos para el equipo local, puesto que una incursión dentro del área de Brian la cortó de forma antirreglamentaria Kilian, clara acción que fue sancionada con penalti, que Yuni, en un arriesgado lanzamiento “a lo Panenka” convirtió en el tanto que, a la postre, le permitió a su equipo sumar un nuevo triunfo.

A partir de este instante el equipo local se volcó a la desesperada sobre su rival al objeto de igualar la contienda, pero unas veces el meta, y otras el propio desacierto de los locales, lo impidieron, sobre todo Pablo, en el minuto setena y nuevo, que solo y en boca de gol desaprovechó quizás la más clara oportunidad de su equipo.

Este arriesgado adelantamiento de sus líneas del Padre Anchieta propició ciertas hendiduras en su retaguardia, que pudieron haberle costado muy caro, pero esta vez fue el larguero el que se alió con los locales y repelió un franco cabezazo de Erik en el minuto ochenta y seis.

En definitiva, un marcador final que le permite al Atlético Rocío sumar tres nuevos puntos que le permiten continuar una semana más en lo alto de la tabla, pero que también hace poca justicia a lo presenciado sobre el terreno de juego, al no premiar no sólo el buen juego desarrollado por los jugadores locales, sino también el gran despliegue físico del que hicieron uso a lo largo de los noventa minutos.
 
Ficha técnica:
ADFC Padre Anchieta: Alberto, Rober, Oria, Vaquero (Guille, min. 79), Nahum, Pablo, Richard, Josito (Mauro, min. 66), Diego, Kiliam (Dani, min. 79) e Ibrahim.
Entrenador: José Fajardo.

Atl. Rocío: Víctor, Ian, Aridane, Nau, Alberto, Ele (Aray, min. 66), Yuni, Alfonso (Pablo, min. 81), Giovanni (Erik, min. 65), Rodri (José Miguel, min. 51) y Brian.
Entrenador: Maxi

Goles: 0-1, min. 72: Juni, de penalti.

Árbitro: Daniel Asencio Fernández, amonestó a los locales Richard y Kiliam, y a José Miguel y Juni por parte visitante.
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Incidencias: encuentros disputado en el Juan Manuel Mesa, ante medio centenar de espectadores.